UN CHASIS A LA ALTURA DE LA ELEGANCIA Y EL RENDIMIENTO LÍDERES DEL SECTOR

29.08.17 Continental GT

El Continental GT es el primer Bentley que incluye un sistema novedoso de muelles neumáticos con tres cámaras para dar una base estable al chasis. Esta configuración de tres cámaras contiene un 60% más de volumen de aire que los muelles anteriores de una sola cámara. Además, dispone de la capacidad de cambiar las cámaras que se usan y las que no para disfrutar de distintos grados de rigidez en los muelles, es decir, pueden estar más apretados o sueltos a diferencia del sistema pasivo que se usaba anteriormente. De esta forma, se puede configurar el chasis para que se adapte a cualquier ocasión, desde el confort a bordo de una auténtica limusina hasta una experiencia deportiva marcada por la rigidez y el control de la carrocería.
La configuración del chasis (altura de conducción, amortiguación, control de balanceo, distribución del par, junto con la configuración del motor y la transmisión) se controla de manera central mediante un control giratorio, el selector de la dinámica de conducción de Bentley.
Esta tecnología incorpora cuatro modos de conducción:
- Sport: para un control máximo de la carrocería y una capacidad de respuesta dinámica.
- Comfort: para una comodidad y un refinamiento optimizados.
- Bentley: una cuidadosa combinación de los ajustes de los modos Sport y Comfort, recomendada por nuestros ingenieros.
- Custom: permite que el conductor elija los ajustes individuales de varios sistemas.
La suspensión delantera es de doble horquilla, mientras que las ruedas traseras son controladas mediante un diseño multibrazo conectado
a la carrocería a través de un bastidor auxiliar ligero en una fundición
de aluminio hueco con un conjunto extremadamente compacto.
La cinemática de la suspensión y la elasticidad de los soportes de los dos ejes incorporan unas cuidadas mejoras para regalar un confort a bordo y una elegancia insuperables sin que se haya sacrificado lo más mínimo la maniobrabilidad.
El Continental GT es el segundo modelo que incorpora Bentley Dynamic Ride, una tecnología de Bentley para el control activo y electrónico de balanceo que emplea un sistema inigualable de 48 V. Al introducir este sistema innovador, se han mejorado la capacidad de respuesta y las sensaciones al volante, la respuesta del chasis, el equilibrio de la maniobrabilidad y el agarre general.
- Un ordenador especial de control detecta los movimientos de las ruedas y ajusta al instante la posición de los actuadores eléctricos rotatorios integrados en las barras estabilizadoras delantera y trasera, reduciendo al mínimo el balanceo de la carrocería en curvas pronunciadas, pero ofreciendo una configuración suave, elástica y refinada para una conducción tranquila. El sistema funciona con muelles neumáticos de tres cámaras para que el chasis sea dinámico y, a su vez, ofrezca un confort excepcional.
- Los actuadores pueden transmitir hasta 1.300 Nm de par con el fin de contrarrestar el balanceo en tan solo 0,3 segundos.
- El sistema ha sido configurado para regalar un confort a bordo insuperable.
- El sistema de 48 voltios que alimenta a los actuadores permite una capacidad de respuesta silenciosa al instante con la que ya no es necesario anticiparse al estado de la carretera.
El Continental GT incorpora también la dirección asistida eléctrica (EPAS). Este nuevo sistema potencia las sensaciones en la conducción a la par que aísla al conductor de las distracciones no deseadas de la carretera. El sistema de dirección incorpora una relación de cremallera variable, lo que aumenta la capacidad de respuesta gracias a unos ángulos más amplios de conducción. De esa forma, se facilita la maniobrabilidad a la vez que se mantiene una estabilidad excepcional a velocidades más altas. Las sensaciones al volante son igual de intensas en todos los modos de conducción, aunque el conductor puede configurarlas en el modo Custom del chasis.
El funcionamiento que emplea el sistema de tracción en las cuatro ruedas es también nuevo en el Continental GT. La transmisión de par entre los ejes delantero y trasero es controlada de forma activa mediante un sistema de gestión de la tracción especial que funciona en combinación con el control de estabilidad electrónico dinámico (ESC).
En condiciones normales, se transmite al eje trasero la máxima potencia disponible. Y se reparte más par al eje delantero si el sistema detecta que necesita más tracción. Esto provoca una menor intervención del control de estabilidad electrónico dinámico y que el vehículo permita un sobreviraje controlado mientras esté en el modo dinámico.
En la dirección lateral, se reparte el par en cada eje con la tecnología de vectorización del par mediante el sistema de frenado, la cual estrenaron el Continental GT3-R y los modelos Supersports. Cuando se frena el interior de la rueda trasera en el trazado de curvas, el morro de vehículo puede girar con más fuerza y velocidad, lo que a su vez mejora
la capacidad de respuesta y la agilidad de la parte frontal. Durante la aceleración al salir de la curva, el vehículo puede frenar ligeramente
la rueda delantera del interior de la curva para desplazar el par por el eje frontal hacia la rueda del exterior de la curva, con lo que logra sacar el máximo partido a la tracción consiguiendo un rendimiento óptimo.
El sistema ha sido renovado para que intervenga menos que antes, lo cual es posible gracias al desarrollo de un nuevo hardware y al mejor equilibrio del que disfruta el vehículo.
El sistema de montaje de la planta motriz sirve de complemento ideal al chasis, ya que este incorpora mejoras que logran un mayor equilibrio entre el confort al volante, la dinámica del vehículo y el conjunto de ruido, vibración y dureza de la planta motriz. Los exclusivos soportes activos del motor W12 gozan de una alta rigidez, la cual permite un máximo control dinámico de la masa del motor con el consiguiente confort en la conducción. Sin embargo, conservan todo el refinamiento a bordo, puesto que cancelan el ruido y las vibraciones provenientes de la planta motriz. Un nuevo tirante de reacción del par se asocia con el montaje de la planta motriz para evitar el movimiento lateral y
el balanceo del motor, lo que conlleva giros más precisos y lineales
con un mayor control.
El sistema de frenado es el sistema de hierro más potente con el que se haya equipado a un Bentley hasta el momento y consta de nada menos que 28 pistones. Los discos de freno delanteros miden 420 mm y se componen de dos piezas que emplean un anillo de fricción de fundición y una campana de montaje de aluminio. Las pinzas frontales cuentan con diez pistones cada una, mientras que las traseras tienen cuatro que se agarran a los discos, los cuales son de una pieza y miden 380 mm.
Los frenos de este tamaño proporcionan una capacidad de frenada fiable de forma continuada a la altura de un gran turismo deportivo que alcanza más de 320 km/h.
Bentley se ha asociado con Pirelli con el fin de crear neumáticos personalizados para el nuevo Continental GT partiendo de un diseño desde cero.
- El vehículo lleva exclusivamente neumáticos Pirelli P Zero, los cuales introducen, como novedad, un tamaño diferente en el eje delantero que en el trasero, una cualidad que les dota de mayores capacidades dinámicas. Durante el desarrollo, los ingenieros de Pirelli se sentaron con sus compañeros de Bentley y trabajaron hasta perfeccionar el paquete que forman el vehículo y los neumáticos en el que alcanzaron un equilibrio óptimo entre rendimiento y confort.
- Los componentes avanzados de los materiales facilitan una capacidad de respuesta de los neumáticos más directa ante las maniobras del conductor. Esto garantiza una experiencia dinámica que es, a su vez, equilibrada y comunicativa.
- El neumático P Zero que incluye este Bentley dispone del sistema de cancelación del ruido de Pirelli, el cual reduce el ruido de la carretera que entra en el habitáculo. Asimismo, se ha mejorado la resistencia a la rodadura en los últimos neumáticos P Zero, lo que disminuye la fricción con el asfalto sin menoscabo del agarre. Así pues, tanto el agarre en seco como en mojado supone un avance, ya que reduce de forma considerable el riesgo de sufrir acuaplaning.
El bastidor auxiliar delantero es exclusivo del W12 y para su fabricación se ha empleado una técnica aeroespacial novedosa para Bentley denominada «thixocasting». Este innovador método de moldeo de metales en estado semisólido produce un componente ideal en lo que a peso, rigidez, solidez y durabilidad se refiere. El bastidor auxiliar delantero es además una parte integrante de la estructura del chasis frontal del vehículo. Su diseño contribuye al máximo a la rigidez torsional de toda la carrocería. Asimismo, proporciona una suspensión óptima y rigidez en los puntos de unión con el motor con el objetivo de minimizar el ruido y la vibración que entran en el habitáculo provenientes del motor y de las interacciones con la carretera.