HERITAGE
HISTORIA DE BENTLEY
RESUMEN
En 1919 Walter Owen (W.O.) Bentley fundó una empresa con un propósito sencillo: crear «un coche rápido, un coche de gran calidad, el mejor de todos». Desde ese momento, Bentley se ha regido por ese principio y, como consecuencia, la marca no ha dejado de avanzar hasta liderar en la actualidad el sector automovilístico de alta gama a nivel mundial.
El 10 de julio de 2019 se celebraba el centenario de Bentley. Este hito extraordinario, logrado por pocas empresas, fue motivo de celebración de su historia, de su presente repleto de éxitos globales y de su emocionante futuro.
Desde sus humildes orígenes, Bentley se ha fortalecido imparablemente a través de su incesante búsqueda del lujo y del rendimiento. Todo el mundo se hizo eco de las victorias de Bentley en Le Mans en la década de 1920 con las que la marca conseguía consolidarse en el automovilismo de competición, hazaña que repitió de nuevo en el siglo XXI.
La visión de W.O. sigue guiando nuestras creencias, acciones y ambiciones. Bentley Motors, ubicada en Crewe, Inglaterra, y propiedad de Volkswagen AG desde 1998, sigue siendo la empresa automovilística británica de lujo por excelencia gracias a la elaboración de los gran turismos de altas prestaciones más codiciados en todo el mundo.
1910 – 1919
Nacido en 1888, W.O. Bentley creció con un gran interés por la ingeniería. Detestaba los coches de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, ya que le parecían peligrosos, poco elegantes y ruidosos, así que a nadie de su entorno le sorprendió que W.O. se dedicara a la fabricación de coches que cumplieran sus enormes expectativas como conductor, ingeniero y caballero.
En octubre de 1919, se fundaba Bentley Motors y en septiembre de 1921 salía de la fábrica el primer Bentley fabricado de serie, el cual se entregó con gran orgullo a su propietario, Noel van Raalte, por 1.050 £. El coche luce el característico radiador de Bentley y el emblema de la «B» con alas.
1920 – 1929
Los Bentleys de la década de 1920 están entre los modelos más icónicos de la era clásica. W.O. Bentley se aficionó al desarrollo de motores de carrera: «Quería hacer un coche rápido, un buen coche: el mejor de su clase...». Lo que dio lugar a la creación del primer motor Bentley de 3 litros y 84 CV, alcanzando velocidades de 130 km/h.
Se alcanzaron numerosos récords de velocidad y resistencia en Indianapolis, La Isla de Man y Brooklands. Sin olvidar los legendarios logros de los Bentley Boys. Logrando victorias en Le Mans en 1924, 1927, 1928, 1929 y 1930; donde el dominio de Bentley en las carreras resonó en todo el mundo del motor.
1930 – 1939
La década de 1930 supuso muchos desafíos para la marca Bentley. Pese a los logros en las carreras de Bentley y su reconocimiento por el público, Bentley Motors se vio azotada por dificultades financieras y en 1931 Rolls-Royce intervino para comprar Bentley Motors.
La producción fue trasladada a Derby, donde se fabricó un nuevo «coche deportivo silencioso» de 3,5 litros en el que se aunaban las mejores virtudes de ambas marcas: agilidad lujosa y potencia silenciosa.
En 1930 Woolf Barnato (presidente de Bentley entre 1926 y 1931 y ganador de Le Mans en 1928 y 1929) apostó 100 £ a que podía llegar a Londres desde Cannes antes de que el Tren azul hiciera el recorrido de Cannes a Calais. Ganó la apuesta, ya que le ganó al tren con tiempo de sobra al volante de su berlina Speed Six de 6½ litros. Con su techo bajo y las imponentes líneas de su capó, el Speed Six alcanza el culmen en cuanto a potencia, resistencia y robustez de los gran turismos de Bentley anteriores a la Segunda Guerra Mundial. El departamento de diseño de Crewe lo considera la mayor influencia en los modelos actuales de Bentley.
1940 – 1949
El traslado a Crewe en 1946 tras la Segunda Guerra Mundial abrió la puerta a una comunidad de ingenieros y mecánicos altamente capacitados que habían emigrado durante la guerra a este concurrido centro industrial. Gracias a tecnologías punteras y un nuevo enfoque hacia la fabricación, por primera vez Bentley pudo fabricar un coche completo listo para llevarlo al límite. El Mark VI fue uno de los primeros que se produjeron, cuya fabricación no se limitaba al chasis estándar y a la carrocería, sino que ya era un Bentley de pleno derecho. La fábrica de Crewe es ahora un lugar en que la precisión del presente se fusiona con la pasión del pasado.
La fábrica de Crewe es ahora un lugar en que la precisión del presente se fusiona con la pasión del pasado.
1950 – 1959
Los avances que conllevó el traslado a Crewe en la década de 1940 permitieron que Bentley Motors transformara coches de gran calidad en gran turismos de lujo y altas prestaciones.
En 1952 el Bentley R-Type Continental hizo su presentación. Era un coupé con carrocería de Mulliner y una velocidad máxima de casi 190 km/h. Se convertía así en el coche de cuatro plazas más veloz del mundo, por lo que se ganó rápidamente la reputación del modelo de lujo y gran velocidad por excelencia. Se trata del último Bentley que se produjo sin un modelo equivalente de Rolls-Royce en 30 años, y tres años más tarde aparecieron las versiones descapotable y el sedán deportivo.
En 1957 Bentley había lanzado el ansiado Bentley Continental Flying Spur de cuatro plazas, y se anunció el Bentley S2 en 1959. Estaba equipado con un nuevo motor V8 de aluminio y 6,2 litros que sustituía la unidad de seis cilindros desarrollada originariamente para los modelos de Rolls-Royce en la década de 1920.
1960 – 1969
La década de 1960 introdujo continuos desarrollos en la familia de Bentley Motors. En 1965, la serie Bentley T fue lanzada y, por primera vez, hacía acto de presencia en la Feria del Automóvil de París. Posteriormente fue rebautizada en 1971 como el Bentley Corniche y en 1984 finalmente pasó a ser el Continental, que es como lo conocemos hoy en día. La serie T, célebre por sus virtudes de diseño y sus suaves prestaciones, fue considerada por los apasionados de Bentley como una revolución en la historia de coches deportivos de la marca.
1970 – 1979
La década de 1970 son los diez años más importantes en la historia de Bentley Motors. Su fundador, amante del motor y creador de uno de los gran turismos de altas prestaciones más deseados del mundo, W.O. Bentley, muere a la edad de 82 en agosto de 1971.
Durante estos años de incertidumbre, la asociación con Rolls-Royce y los socios carroceros, como Mulliner, dejaría una huella imborrable de lujo y refinamiento en el ADN de Bentley, una que, sin duda, habría sido del agrado del propio W.O.
Durante esta década, se renovó el famoso motor V8 de forma que aumentaba su capacidad a 6,75 litros, un tamaño que conserva hasta el presente.
1980 – 1989
La década de 1980 es testigo de cómo la identidad de Bentley evoluciona y nace la gama Bentley y la línea de modelos que conocemos en la actualidad. La herencia de Bentley en Le Mans se deja ver en el nombre de la nueva serie T, el Mulsanne, el cual disfruta de un nuevo diseño de suspensión trasera. En 1982 se presenta un Mulsanne turbo de altas prestaciones capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos y en 1985 se desarrolla el Mulsanne de nuevo para ser el Turbo R, el Bentley más rápido sobre el asfalto de la época. El Bentley Corniche cambia su nombre a Continental en 1984, uno de los modelos más vendidos hasta la fecha.
En 1989, la mitad de los coches que salían de Crewe era de la marca Bentley. Diez años después de la presentación del Mulsanne Turbo, Bentley empezó a vender dos unidades por cada una de Rolls-Royce.
1990 – 1999
La adquisición de Bentley por parte del Grupo Volkswagen en 1998 supuso una mayor inversión en recursos, nuevas tecnologías y un mayor impulso al renacimiento de Bentley. Se anunció que Bentley y Rolls-Royce volverían a ser empresas independientes tras estar ligadas entre sí durante 67 años. Volkswagen AG anunció que invertiría 500 millones de libras en la marca Bentley, su fábrica en Crewe y la producción de un nuevo Bentley. Esto fortaleció el deseo de Bentley de mantenerse fiel a su linaje británico.
En la década de 1930, cuando Bentley era propiedad de Rolls-Royce, se estilizó, se enderezó y se puso la misma cantidad de plumas a las dos alas del emblema. Se devolvió la asimetría del logotipo en 1990 y, desde entonces, se han introducido continuas revisiones para darle un aire contemporáneo a la identidad de Bentley. El logotipo de Bentley encarna los nuevos valores, pero mostrando respeto por su pasado.
2000 – 2009
En 2001 Bentley había revivido su legado con su vuelta a la competición Le Mans, donde participó con dos modelos EXP Speed 8. El equipo acabó tercero, con lo que Bentley recuperaba un puesto en el podio tras 71 años. En 2001 Bentley anunció que iba a crear la primera Bentley State Limousine con un diseño personalizado a través de Bentley Mulliner para nada más y nada menos que Su Majestad la Reina de Inglaterra con motivo de su Jubileo de Oro. Se trataba del primer Bentley usado en una ocasión solemne.
En 2003, se lanzó el Continental GT, el primer coche de la era moderna de Bentley. El primer Continental GT, que estaba inspirado en el R-Type, inauguró un segmento de mercado totalmente nuevo, el del gran turismo lujoso moderno.
El 2009 también fue un año importante en la historia de Bentley. Para celebrar los 90 años de Bentley Motors, el nuevo Bentley Mulsanne se une a la gama, condensando en sí 90 años de experiencia en el sector. El Bentley Mulsanne aúna las tecnologías modernas de calidad, pero reflejando el mismo deseo de W.O. Bentley. Como resultado, toma la artesanía y el lujo máximo que caracterizan a la marca, pero transportándolos al futuro.
2010 – 2020
En 2015, Bentley presentó el Bentayga, el primer SUV de lujo que se convertiría en la cuarta gama de modelos de Bentley. El Bentayga es el SUV más veloz, potente y lujoso, en definitiva, el más exclusivo de todo el mundo.
En 2018, se presentó el nuevo Continental GT de tercera generación. Su aspecto era más definido, su peso era más ligero, ofrecía una mayor velocidad y desprendía un mayor refinamiento. Con esta carta de presentación, el Continental GT se convertía en el gran turismo por excelencia.
Se lanzó el nuevo Bentley Flying Spur en 2019 y, a principios del año siguiente, el Bentley de dos puertas más singular de su era moderna y la expresión máxima de un biplaza, el lujoso barchetta Bacalar. Con solo 12 unidades de este impresionante modelo de edición limitada, el Bacalar supuso el retorno a la fabricación de carrocerías de Bentley Mulliner, el carrocero más antiguo del mundo.
También en 2020, contra viento y marea en medio de la pandemia mundial, la empresa logró cifras de ventas que lograron un récord. También fue el año en que Bentley anunció su estrategia Beyond100 con la que aspira a conseguir la neutralidad de carbono para el año 2030 gracias a la transformación de toda la gama de modelos a vehículos eléctricos de batería.
